Cadereyta a simple vista puede parecer una ciudad en eterno crecimiento de lo rural a lo urbano, pero para mí siempre ha sido eso lo mas bello de esta ciudad, esa mediación lo hacía tan bonito y neutral que no era necesario ir tan lejos para disfrutar de la naturaleza y después encontrar algo de pavimentación, uno podía ir a los montes a cazar camaleones y grillos para poder coleccionarlos al mas puro estilo pokémon o ir al río para disfrutar el agua cristalina después de las lluvias recolectando esas hermosas piedras de río.
Además como no recordar a esa singular gente que caracteriza a este pueblo, como a Don Lalo, ese señor que sufría de una enfermedad que siempre se comportaba como un niño y me hacía pasar una excelente tarde viendo sus peripecias, pero hay de aquel que lo hiciese enojar, o el señor que estaba malito que se ponía enfrente del café Mante, según para pedir limosnas, aunque algunas amigas se quejaban de él por que como siempre estaba sentado mirando hacía arriba, ellas pensaban que les veía el trasero o como no aquella que nos decía: Dame dinero, Dame más dinero!, a veces se me hacía medio extraña pero por su edad y alguna enfermedad que tuviera se me hacía simpática y claro Don Juanito, el que nos llevaba en el camión a la escuela, muchos niños de los 80s hasta finales de los 90s lo recordamos con mucho cariño, desde que empezó con esa combi hasta ese camión escolar, que hasta hace unos años lo vi con un moño negro que me hizo pensar lo peor.
Sin embargo gente de esta clase tan divertida, extravagante, tan "Cadereytana" que hace que me sienta identificado con ella y querer a este municipio aún queda y nos hacen sentir de aquí, como por ejemplo ese señor tan buena onda que hace que me sienta como si estuviera viendo a Santa Clos cada madrugada a su vuelta de rueda para que los niños no sufran algún accidente vial, o ese señor que más que merolico parece todo un cronista deportivo o anunciante de radio que me saca una sonrisa cada vez que lo escucho.
Obviamente esos bonitos lugares de la ciudad que no pueden faltar como la plaza de toros, la plaza municipal, el café Mante, el restaurant la Estrella que venden un delicioso cuajito, el Restaurant la Enramada que por tradición es de los mejores de aquí en fin, tantos y tantos lugares que me hacen recordar y sentirme que nunca ha pasado el tiempo por aquí a pesar de sus cambios y nuevas construcciones.
Sin embargo de un tiempo para acá las cosas se han puesto feas por aquí por X o Y razón, pero aun así sigo queriendo a mi ciudad, aquella que me ha visto crecer y me gustaría poner algunas imágenes para reconfortarme y pensar que esto es una pesadilla.
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Grandiosa vista de la Refinería de Cadereyta Ing. Héctor R. Lara Sosa |
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Puente Nuevo, Que ahora es el viejo, pero que es el de la calle Gómez Morín |
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Parque del Recuerdo, San Juan según dicen lugar que vio nacer el Beisbol en México |
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Iglesia San Juan Bautista, tan bella por fuera y mas hermosa aun por dentro. |
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Amanecer desde la Refinería |
Y para terminar...
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Bello atardecer, del lado derecho hay tres cruces, este lugar es el calvario, lugar donde se hacen cada año los viacrucis, lado izquierdo el cerro de la Silla que nos cubre con su majestuosidad cada día y en medio de ellos el Señor Sol.
Ya para terminar este trabajo escolar referente al Bicentenario |